Etiquetas

miércoles, 8 de noviembre de 2023

EQUIPAJE GOZOSO



Amaneció un nuevo día

envuelto en la nube de todos los días.

Se dolió de un hueco en el abdomen,

como le dolían todos los huecos sin rostro.

Sorbió una lágrima que resbalaba,

como hacía con todas sus mutiladas lágrimas

sin advertir

que entre sus párpados alumbraba el cielo,

que en sus labios germinaba un beso interminable,

que en las axilas florecían sonrisas,

que sus pechos ya estaban amamantando libertad,

que por su espalda ascendían camelias trepadoras,

que de sus costados brotaban ríos de risa,

que por su vientre se derramaba un bello bálsamo

que ahuyentaba nubes,

rellenaba huecos,

enjugaba lágrimas;

sin advertir

que esa noche

una madre titilaba al final del pasillo.

Se creía un cuerpo triste

sin advertir

que otro cuerpo alumbraba sus perfiles

aun en la misma noche.

Se creyó niña

sin advertir

que un cuerpo ansiaba hacerla madre

crepitando su dulzura entre las ascuas de su tristeza.

Se creyó fauna nocturna

pero una mariposa revoloteaba con ella mientras el sol ascendía.

Se creía barro estéril

sin saber que era Dios que jugaba al escondite

con forma de niño.


1 de mayo de 1994.

 Primer día de la Madre